El Observatorio de Tendencias del Hábitat ha presentado recientemente su ‘Cuaderno de Tendencias del Hábitat 2019-2020’, en el que figuras del mundo del arte, diseño, arquitectura, interiorismo, etc. marcan las que serán las tendencias para los dos próximos años. Unas tendencias, por otro lado, que si algo dejan patente es cómo nuestro modo de relacionarnos, de cómo habitamos, cambian nuestro entorno y a la inversa.

Tendencias

Los usuarios tienen acceso a información cualificada y exigen sencillez de uso, facilidad, calidad, sostenibilidad e interacción y eso, inevitablemente, va a marcar hacia dónde se encamina la transformación de nuestro hábitat. A continuación presentamos algunas de estas tendencias:

  • Less is a Bore. Se acabó el minimalismo y ese cúmulo de tendencias contenidas y sobrias. Volvemos a la máxima expresión de la decoración, con el estilo ecléctico como autoexpresión personal y una búsqueda de espacios y objetos más recargados. En los dos próximos años vamos a asistir a una mayor teatralidad en los interiores, fruto del clima de optimismo ante la recuperación económica cada vez más palpable. Regresamos a ese afán por internar captar la atención.
  • Memento Desing. La globalización impacta de lleno en las tendencias para 2019-2020 y eso se evidenciará en la colaboración entre marcas globales y artesanos o diseñadores locales surgen estilos auténticos inspirados en diferentes épocas y lugares. Se va a imponer lo emocional frente lo racional, con mucha presencia de las raíces y la cultura propia, desterrando el individualismo y con ansias de viajar y conocer otras culturas.
  • (Dis)Connection Space. Vivimos en una sociedad tan frenética que la tendencia se encamina a la búsqueda de diseños más esenciales, destinados a contrarrestar el estrés diario a través de formas y materiales capaces de ejercer una influencia relajante en las personas. Se intenta alcanzar la conexión con uno mismo, con los otros y con el entorno, mirando a grandes clásicos y a propuestas atemporales. En cierto modo y a través de una estética donde predomina el orden y la armonía, se persigue encontrarse con la naturaleza y vivir plenamente cada momento. Se cambia el consumismo de volumen por productos de mayor calidad encaminados hacia estilos de vida más saludables.
  • Life is co-. Cada vez compartimos más (coworking, coliving…), consecuencia de la limitación de espacio y una creciente aglomeración. Ello va a derivar en la demanda productos funcionales, emocionales y transformables que sean capaces de responder a múltiples necesidades espaciales. Como consecuencia de ello, las casas dispondrán de productos más versátiles, para distintos usuarios y ocasiones. Es el modo en que los espacios se adecúan a diferentes perfiles y actividades de forma rápida y sencilla, comenzando por su mismo diseño y arquitectura, donde la flexibilidad será la norma.
  • Hyperdigital. En plena era digital, no podíamos olvidarnos del impacto de la tecnología, que también encontrará su protagonismo al servicio del diseño, con motivos y colores manipulados digitalmente para dar lugar a ambientes futuristas, artificiales e, incluso, surrealistas. Materia y tecnología se fusionan de forma innovadora en muchos de los productos del hogar, si bien es cierto que cada vez más se prioriza disfrutar en lugar de poseer, lo que supone una menor presencia del producto físico.
  • Sustainability Record. La sostenibilidad no se escapa de las tendencias 2019-2020. A las exigencias de que los productos tengan un menor impacto medio ambiental se suma ahora que también sea saludable, bello y adaptado a las tendencias. La responsabilidad con respecto al entorno, tanto social como individual, se incrementa y con ello la demanda de productos que respeten los criterios de la economía circular seguirá aumentando. En este contexto, el consumidor tendrá en cuenta los valores de marca en sus decisiones de compra.